El banco central de Brasil está “100% comprometido” a llevar la inflación a la mitad de su rango objetivo, dijo el director de asuntos internacionales Paulo Picchetti, mientras busca tranquilizar a los inversores cuyas expectativas a largo plazo se mantienen medio punto porcentual por encima del objetivo del 3% .
Una decisión dividida en la votación de la semana pasada para desacelerar el ritmo del actual ciclo de flexibilización de la autoridad monetaria provocó que los activos brasileños se desplomaran mientras los operadores evaluaban los desacuerdos entre los miembros de la junta alineados con el jefe del banco, Roberto Campos Neto, y los nombrados por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
La ruptura generó preocupaciones sobre el enfoque del banco ante la inflación una vez que Lula obtenga la mayoría en la junta directiva después de elegir dos directores más y reemplazar a Campos Neto a fin de año. Picchetti, uno de los cuatro designados por Lula en la junta actual, sorprendió a los inversores que dijeron que había expresado más preocupación por el crecimiento que por la inflación durante un evento privado en Washington antes de la decisión.
“Las divergencias son saludables”, dijo Picchetti sobre la votación durante una entrevista telefónica el martes que se limitó a preguntas sobre las actas de la última decisión sobre tasas del banco. “Seguimos 100% comprometidos a reducir la inflación a nuestra meta del 3%”.
Después de recortar el índice de referencia Selic un cuarto de punto a 10,5 %, el banco dijo en las minutas que ve unánimemente tasas de interés más restrictivas en el futuro. Los cuatro designados por Lula se habían unido para votar por una séptima caída consecutiva de medio punto.
No se discutió el cambio de orientación.
Las autoridades habían señalado durante su anterior decisión sobre las tasas que mantendrían su ritmo en mayo. Pero Campos Neto alertó el mes pasado a los inversores sobre la posibilidad de que pudieran desacelerarse durante un evento público en Washington.
El consejo debería “priorizar los mecanismos oficiales de comunicación” que son “el resultado de conversaciones entre los miembros del consejo” en lugar de exponer cada discusión o argumento interno al escrutinio público, dijo, añadiendo que las declaraciones de Campos Neto no habían sido discutidas plenamente entre los miembros del consejo .
“Esta comunicación del presidente ocurrió en un evento y honestamente no sé si tuvo el objetivo y la intención de hacer de esto una guía, pero terminó siendo así”, dijo.
Picchetti descartó la idea de que la decisión dividida expusiera diferencias políticas entre los miembros de la junta.
“Hubo una enorme exageración en el sentido de atribuir puntos de vista muy simplistas a las decisiones de un lado y del otro”, afirmó. “El acta fue la oportunidad que tuvimos para dejar claro que se trataba de un argumento técnico”.
Los analistas brasileños mejoraron el lunes sus previsiones de tipos de interés para fin de año 2024. Mientras tanto, en las últimas semanas los inversores han aumentado sus apuestas de que la inflación se mantendrá obstinadamente por encima de la meta del banco hasta 2027, lo que sugiere que son cada vez más escépticos ante las afirmaciones de las autoridades de que están concentrados en controlar los aumentos de precios.
Pero Picchetti reforzó el mensaje general de las minutas, diciendo que la junta en su conjunto –incluidos los miembros designados por Lula– están concentrados en reducir la inflación a la meta.
“A menos que haya evidencia que diga que esto sería ineficaz en el horizonte que podemos ver, no hay razón para no comprometerse con el centro de la portería”, dijo. “Claramente, todavía tenemos una tasa restrictiva, incluso con un recorte de medio punto todavía tenemos una tasa restrictiva”.
Fuente: BNN Bloomberg
